Busca promover de manera decidida, la inclusión social y el bienestar integral de las personas en situación de calle, mediante la provisión de medios efectivos y apoyos institucionales orientados a su reintegración plena en la vida en sociedad. Dicha reintegración deberá garantizar el acceso progresivo y sostenido a servicios de salud, educación, vivienda, empleo y programas de rehabilitación o atención psicosocial, según las condiciones particulares de cada persona.